Los africanos ya no son los únicos en emigrar por razones económicas y para mejorar así sus condiciones de vida. Los europeos también emigran cada vez más. Estos nuevos migrantes se dirigen hacia el continente africano, con la esperanza de encontrar trabajo.
A mediados de abril, los guardacostas argelinos detuvieron a cuatro inmigrantes clandestinos españoles, en el litoral occidental, como informa el diario argelino Liberté, en su edición del 17 de abril del 2012. Se trata de un hecho totalmente inesperado, ya que, por lo general, son los inmigrantes africanos los que son interceptados en las costas españolas.
Sueños de exilio en tierras africanas
¿La razón que dieron estos cuatro jóvenes españoles para migrar hacia África? La crisis económica mundial que mina España desde hace años. Estos jóvenes se dirigían hacia Orán, que cuenta con muchas empresas españolas. Ellos esperaban ser contratados por alguna de ellas. Según Liberté, los cuatro inmigrantes españoles en Argelia perdieron su trabajo en una empresa que se declaró en quiebra en España y solicitaron el visado para emigrar a Argelia.
Los españoles no son los únicos en Europa que sueñan con encontrar un trabajo en África. Sus vecinos portugueses también; son numerosos los que han probado suerte en Angola, excolonia portuguesa. El pasado 2 de febrero, 20 portugueses fueron detenidos en el aeropuerto de Luanda, capital angoleña, por los servicios de migración y extranjería. Poco después, fueron reenviados a Lisboa, capital portuguesa, porque sus visados habían sido considerados falsos por parte de las autoridades angoleñas. Estos migrantes afirmaron a una cadena de televisión que fueron encerrados en una sala del aeropuerto donde fueron amenazados.
Expulsados de Angola 42 trabajadores ilegales portugueses
El ministro de Asuntos Extranjeros de Portugal intentó calmar la situación, prometiendo una "investigación, junto con las autoridades angoleñas, para buscar la forma de prevenir este tipo de problemas". Según un responsable angoleño de los servicios de migración "se negó la entrada en territorio angoleño a estos portugueses por varias razones: falta de medios de subsistencia, visado caducado, mal estado del pasaporte, falta de pago de una multa anterior por estancia ilegal en Angola y desacato a la autoridad".
El número de inmigrantes portugueses que huyen de la crisis económica de Portugal hacia Angola, de hecho, ha aumentado rápidamente. En julio del 2011, 42 portugueses que trabajaban ilegalmente en Angola, fueron expulsados. Frente a esta tendencia que va en aumento, "Angola no hace más que aplicar de manera rigurosa las buenas prácticas internacionales en materia de migración", aseguró un responsable angoleño.
¿Y si los jóvenes europeos atravesaran el Mediterráneo para emigrar?
Angola y Portugal firmaron un acuerdo el 15 de septiembre del 2011, que quiere facilitar las condiciones de concesión de visados de entrada entre los dos países. El acuerdo concluido en Lisboa por Georges Chikoti, ministro angoleño de Asuntos Exteriores, y su homólogo portugués, Paulo Portas, permite también entradas múltiples en los dos países o la prolongación de la estancia, si el visado expira.
La prensa portuguesa no ha dejado de constatar el aumento del número de inmigrantes portugueses en Angola. Según un diario de Lisboa, en el 2006, solamente se registraron 156 visados de portugueses que partían para Angola. En el 2011, el número explota y alcanza los 23 mil 787. En el 2012, hay registrados cerca de 100 mil portugueses residentes en Angola, es decir, el triple que de angoleños instalados en Portugal. Una migración que las autoridades portuguesas alientan, según el periódico camerunés Camer.be.
Un editorialista portugués también dijo recientemente: "La vieja Europa deprimida. La zona euro a punto de implosionar y la recesión amenaza. En África, el crecimiento económico es constante. ¿Y si los jóvenes europeos atravesaran el Mediterráneo para emigrar?". ¿Y si un día África se convierte en el verdadero El Dorado para todos aquellos que quieran huir de la miseria en Occidente? (Revista Fundación Sur).